Algo sobre nuestra historia

Resumen

El 28 de enero de 2005, el Sindicato Médico del Uruguay celebró el vigésimo aniversario de la derrota de la intervención, hecho ocurrido ya en los estertores finales de la dictadura militar.

Ese inolvidable jalón democrático significó la reconquista de las mejores tradiciones y concreciones del gremio médico. Una de las más trascendentes fue el inicio de la segunda época de la Revista Médica del Uruguay, a partir de ese mismo año 1985.

La Revista Médica del Uruguay había sido creada en los inicios de la dictadura, durante la presidencia del Dr. José Pedro Cirillo. Al decir de su actual director, el Dr. Ariel Montalbán, “su nacimiento va de la mano del impulso, la creatividad, el entusiasmo y la valentía de cuatro jóvenes médicos: Juan Carlos Macedo, Homero Bagnulo, Hugo Dibarboure y Barrett Díaz”(1).

El imprescindible Macedo definía el surgimiento, ocurrido “en otros tiempos, en tiempos oscuros, ya instalada la dictadura”, como “un acto de reafirmación de la presencia del gremio, de legitimidad de su vigencia, como un acto de claridad y reunión desde nuestra especificidad, como un acto de civilización en tiempos de destrucción”(2).

La reconquista del Sindicato fue también la recuperación de la Revista Médica del Uruguay que, con este primer número del volumen 21, alcanza los veinte años de su segunda época.

Durante estos veinte años un grupo de colegas –tan destacado desde el punto de vista académico como sindical– ha tomado sobre sus hombros, en forma honoraria y desinteresada, la compleja tarea de mantener y calificar cada vez más a la Revista Médica del Uruguay. Este esfuerzo individual y colectivo, junto a una clara política de apego estricto al sistema de árbitros, la ha llevado a ser la principal publicación biomédica nacional, a estar incluida en bases de datos internacionales y, por ello, ser la más frecuentemente citada en trabajos publicados en revistas extranjeras.

También durante estas dos décadas se desarrolló el formato electrónico –que desde el año 2002 dio un salto en calidad al pasar al formato PDF– facilitando enormemente la accesibilidad a la producción de los investigadores uruguayos.

La Revista Médica del Uruguay afronta nuevos desafíos en su intención por acceder a estándares de calidad aun más exigentes. La enorme experiencia y capacidad de trabajo del Consejo Editorial que la ha conducido con tanto acierto en los últimos veinte años, junto al aporte de los nuevos integrantes que el Comité Ejecutivo ha designado, nos permite esperar nuevas realizaciones.

“La actuación en el área de la cultura médica es una de las vertientes de la política gremial de mayor importancia, impacto y responsabilidad que debe cumplir el SMU. Es una tarea constitutiva”(2).